Una ola, dos olas,
tres.. Mirando al mar contaba las olas, lo hacia porque me parecía menos triste
que contar las veces que llegaba el agua y se llevaba los cimientos del
castillo que quería construir. Cada vez que el mar me arrebataba lo que con
esfuerzo construía una y otra vez, deseaba que bajara la marea. Porque no baja?
Quizás siempre sera alta la marea? Espere y espere, casi me lanzo al mar, casi
lo doy por perdido, cuando no albergaba ninguna esperanza, me levante y me
aleje pensando que jamas lo lograría. Ande y ande, a paso lento, arrastrando
mis pies bajo la arena, sin mirar atrás. Al llegar al punto donde creí que
perdería el mar de vista, me gire, quería verlo una vez mas, pero cuando me di
la vuelta vi el mar mucho mas lejos de lo que esperaba, no me lo podía creer,
había bajado la marea, por fin... Corrí y me tire a la orilla donde mis huellas
en la arena desaparecían, y con gran esfuerzo empecé a construir mi gran
castillo. Mi maravilloso castillo, "cuando este terminado ni el mayor tsunami
podrá derribarlo" pensaba, mientras, unía granitos de arena, uno tras
otro, sin parar. Entusiasmada, ilusionada, esperanzada, así me sentía, cuando
note una mano en mi hombro. Me gire desconcertada, sin saber que encontraría, y
la vi, solo hizo falta mirarla a los ojos, me volví a enamorar. De pronto sentí
el agua bajo mis pies, la marea había subido, mas que nunca. Me quede ahí,
mirándola y apartando la vista, sin saber que hacer, sin saber que decir. El
cielo se volvió gris, el mar se agito, el viento se enfureció. Y yo lo único
que quería era echarme en sus brazos y no separarme nunca. Cada sentimiento que
había llevado al fondo de mi corazón, escondiéndolo, ocultándolo, en un segundo
salieron todos a flor de piel, sin embargo en sus ojos no veía nada, ya no
brillaban al mirarme, no había luz, esa luz que tanto me hizo sentir en el
pasado, había desaparecido, y de pronto lo entendí. Porque esperar algo que
posiblemente jamas volverá?
No quiero pasar mi vida en una playa desierta construyendo un castillo donde guardar sentimientos. Un castillo infranqueable, porque lo que yo buscaba no era evitar que nada entrase, sino que nada saliera. Pase largo rato ahí de pie, mirando, pensando, sin decir una palabra, en muchos momentos me falto poco para cometer una locura, porque necesitaba volver a sentir el calor de sus labios en los mios, pero eso lo echaría aun todo mas a perder, cuando entonces lo supe.
Jamas volveré aquí, caminaré y lo haré hasta que de tanto andar ese fuego que tengo en mi se consuma, o hasta que encuentre a alguien que sea capaz de apagarlo.
Nunca digas nunca, eso dicen, así que no diré que no volveré, pero si lo hago ya todo sera distinto.
No quiero pasar mi vida en una playa desierta construyendo un castillo donde guardar sentimientos. Un castillo infranqueable, porque lo que yo buscaba no era evitar que nada entrase, sino que nada saliera. Pase largo rato ahí de pie, mirando, pensando, sin decir una palabra, en muchos momentos me falto poco para cometer una locura, porque necesitaba volver a sentir el calor de sus labios en los mios, pero eso lo echaría aun todo mas a perder, cuando entonces lo supe.
Jamas volveré aquí, caminaré y lo haré hasta que de tanto andar ese fuego que tengo en mi se consuma, o hasta que encuentre a alguien que sea capaz de apagarlo.
Nunca digas nunca, eso dicen, así que no diré que no volveré, pero si lo hago ya todo sera distinto.