Mellon.

- Nada, es inútil. No sé qué será.
- Es un acertijo. Di «amigo» y entra. ¿Cómo se dice amigo en élfico?
- Mellon.


 Cuando una persona me pregunta que siento por ella por mi cabeza pasan muchas maneras de poder expresarlo. Dependiendo de cómo considere yo a esa persona le responderé con una breve respuesta, o como de verdad se merece que le abra mi corazón.

 Podemos remontarnos al principio como tantas veces hemos intentado hacer, cuando empezamos a sentir? Cuando empezamos a ser amigos? Pues bien, a mi parecer, cuando tienes una pareja siempre queremos llevar la cuenta de todo, recordar el día y el momento exacto en el que nuestros ojos se cruzaron y decidieron que te gustaría compartir algo bonito con la otra persona. Siempre intentamos marcar día, hora, lugar, situación… con una pareja celebramos aniversarios, queremos tenerlo todo controlado. Con un amigo todo eso realmente sobra, que más da el momento, la hora, el día en que te conocí? Solo importa lo que hemos construido a lo largo de los meses, años y días, solo importan esos momentos inolvidables que nunca olvidaremos.
 Día a día construimos esas anécdotas que nos marcaron el ayer, en una amistad no recordamos el día, recordamos el momento, esos sucesos importantes que pasamos juntos, no tienes esa presión de recordar el día en que empezó todo, porque no hay razón para celebrarlo, para mí la amistad se celebra todos los días.
Por otro lado, cuando llamamos amigo a alguien, detrás de esa simple palabra se esconden muchos sentimientos, cada persona tiene los suyos propios da igual que sean más o menos, lo que de verdad importa es lo profundo que los sientas.
 Hemos tenido muchos altibajos, momentos que hemos estado más unidos, situaciones que nos han hecho separarnos, pero da igual el tiempo que haga que te conozco porque en estos años, meses, días, horas, hemos construido la confianza, el cariño, respeto, tolerancia, ilusión.. Eso es lo que yo siento hacia ti, y lo siento gracias a que hemos compartido sonrisas, secretos, conocimientos, anhelos, pensamientos, risas, sentimientos, lagrimas, sueños…

 Cada segundo junto a ti lo guardo como un preciado tesoro en mi corazón. Gracias por demostrarme tu preocupación por mí, gracias por dedicarme tu tiempo, tiempo para sonreír.

No te escribo esto esperando nada a cambio, te lo escribo porque ayer, mañana, pero sobre todo hoy, te considero mi amigo, amigo que quiero muchísimo y con quien me encanta que pasen los días de mi vida.